Oncología Medica - Braquiterapia: eficacia y seguridad para tratar tumores de próstata órgano-confinados

Braquiterapia: eficacia y seguridad para tratar tumores de próstata órgano-confinados

Braquiterapia: eficacia y seguridad para tratar tumores de próstata órgano-confinados

La braquiterapia es una técnica que permite tratar el cáncer de próstata sin los efectos secundarios que acarrea una cirugía. El doctor Benjamí Guix, director médico de la Fundació IMOR, explica los detalles de esta técnica y cuáles son sus ventajas.

Braquiterapia y su trayectoria

La braquiterapia lleva aplicándose en Estados Unidos desde hace más de 20 años y allí está considerada como una técnica de primera elección. En nuestro país hace algo más de una década que se emplea con éxito ya que los buenos resultados obtenidos en América son una garantía de los resultados que se pueden obtener aquí. Se ha llevado a cabo un seguimiento de los pacientes tratados y se ha visto que la supervivencia ha sido a lo largo de mucho tiempo, manteniendo siempre la calidad de vida del paciente.

Cómo se aplica

La braquiterapia en próstata requiere un poco de anestesia local por medio de un pinchazo en la espalda que duerme parte del periné. El tratamiento tarda en realizarse entre 60 y 90 minutos y tras su aplicación, el paciente puede marcharse a casa al poco rato. Distinguimos dos tipos de braquiterapia. Por una  parte, la braquiterapia de semillas, en la que unas semillas radioactivas se aplican dentro de la próstata y se dejan que vayan actuando poco a poco una vez el paciente abandona el centro médico. Este tipo de braquiterapia se aplica cuando hablamos de un tumor poco agresivo con un PSA bajo. Si en cambio estamos ante un cáncer de mayor agresividad lo mejor es optar por una braquiterapia de alta tasa de dosis que consiste en la aplicación de un flash dentro de la próstata que irradia radioactividad.

Beneficios frente a la cirugía

Hace unos años el tratamiento básico para el cáncer de próstata era la cirugía, que comportaba muchos efectos secundarios que hoy en día con la braquiterapia no se producen. Con la braquiterapia no existe riesgo de sangrado ni tampoco se han de hacer transfusiones sanguíneas. El riesgo de incontinencia urinaria tampoco existe y los casos de impotencia son prácticamente nulos. Tras la aplicación del tratamiento el paciente puede marcharse a casa sin necesidad de dormir en el hospital.

¿Cuándo se puede realizar la braquiterapia?

Para ser candidato a la braquiterapia el tumor debe estar órgano-confinado. Los hombres, a partir de los 50 años, deben realizarse un análisis de sangre que determine el PSA. Este parámetro nos dirá qué riesgo tiene una persona de tener este tumor. Gracias a este análisis se puede seleccionar a la población a quien biopsiar y realizar una detección precoz del tumor.

Otros puntos a tener en cuenta

Los grandes avances producidos en oncología radioterápica han permitido que técnicas como la braquiterapia protejan los tejidos sanos y que la radiación que emiten sus fuentes se centre solo en el foco del tumor. Para conseguir esto se cuenta con técnicas de imagen y cálculos de gran precisión que indican en qué lugar colocar las fuentes radiactivas. Por otra parte, no podemos obviar los resultados sobre la nicotina que ha arrojado un estudio bastante reciente. La nicotina del tabaco favorece la diseminación del cáncer desde la próstata hacia otros órganos. Así que lo que primero que deberá hacer un paciente con cáncer de próstata es dejar de fumar.

1 Ficheros de sonido (14:11 mins):

Reproducir entrevista con el doctor Benjamí Guix, director médico de la Fundació IMOR. (14:12 minutos)

Via:http://www.vivirmejor.es/

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